Hemos hablado muchas veces de reservas naturales, escenarios nevados, vertientes montañosas, bosques y parques rodeados de lagos y manantiales, y también han sido enmarcados en leyendas, historias e investigaciones como lo que puede ser lo que aconteció históricamente en la provincia de Mendoza, con el agua mineral Villavicencio y toda un andamiaje de enriquecedoras vivencias.
Primeramente tenemos que señalar que se conoce como reserva natural a un Area Natural que es protegido por todas las características biológicas e hídricas que posee, o sea a la flora y fauna del sitio y a todos los históricos valores culturales de carácter arqueológico y palentológico. Es a lo largo de este paso precordillerano donde San Martín atravesará el camino entre Argentina y Chile, por lo que es hoy el departamento de Las Heras, y precisamente localizado en la Cruz de Paramillos.
A fines del siglo XVII se produce la llegada de un capitán de las Islas Canarias de España, llamado Joseph Villavicencio que participó junto a Pedro del Castillo de la fundación de Mendoza, pero recién será en 1904 cuando un médico mendocino llamado Luis Funes y un farmacéutico llamado Enrique Suárez fundan la “Unión Villavicencio S.A”. Posteriormente a ello, unos 20 años más tarde el gobierno mendocino les obligará a trasladar el agua mineral desde los manantiales hasta la ciudad para que todos los habitantes del pueblo puedan contar con derecho gratuito al agua.
Esta reserva natural cuenta con más de 70.000 hectáreas entre los cerros que van desde los 900 a los 3.200 msnm en la cual el agua cae en forma de lluvia o de nieve y se va a infiltrar desde los elevados picos montañosos hasta el interior de la montaña, de la cual surgirá en forma de manantial a los 1.750 msnm, adquiriendo en su recorrido todo el aporte de los minerales.
Como sabemos, las aguas minerales cuentan con una gran cantidad de propiedades y beneficios para la salud del organismo humano, y ello se evidencia no solo en la necesidad de cubrir el porcentaje de agua que precisamos diariamente para sobrevivir, sino también en las cualidades que presentan cada uno de los componentes que integran el agua mineral natural. Actualmente, y luego de 100 años de existencia, el agua Villavicencio se convirtió en la más comercializada de Argentina, pertenece al grupo Danone y está compuesta del siguiente modo:
Ca: 39,2 mg/litro
Mg: 40,8 mg/litro
Na: 128 mg/litro
K: 5,2 mg/litro
HCO3: 384 mg/litro
Cl: 27,6 mg/litro
SO4: 148 mg/litro
Tenemos que destacar que el agua mineral Villavicencio tiene un aspecto visual límpido y brillante, en nariz se destacan algunas notas minerales, agradable, con leve intensidad y equilibrada, ideal para estas épocas de elevadas temperaturas en las que el organismo necesita hidratarse aún más, para absorber, transportar y utilizar todos los nutrientes de nuestros alimentos diarios. Bon Appetit.